Y sigue Roberto Quiñones Haces, periodista, escritor, abogado, en una cárcel de Guantánamo por atreverse a escribir libremente e intentar cubrir, de manera independiente, un juicio público en Cuba. Ni siquiera el avance del coronavirius ha sensibilizado a sus carceleros:
«Roberto Quiñones cumple sanción de un año por querer escribir la verdad, las verdades que le molestan al poder. Lo han lanzado a las sombras pensando que el mundo se olvidará pronto de él, un periodista y abogado que sólo ha querido ser honesto, hacer un periodismo libre, al servicio de la verdad y no de un partido que considera la verdad un delito». Ramón Fernández Larrea en ADN Cuba
«Hugo Landa, director del sitio digital Cubanet, para el que reportaba Quiñones cuando fue detenido, dice que la severidad de la medida obedece a diversos factores. ‘Primeramente, Roberto tiene una tradición de lucha contra la dictadura desde los años noventa’, dijo Landa, que enmarca la condena en el contexto de crisis energética que vive Cuba y al posible racionamiento, en el futuro, de otros bienes y servicios. ‘El gobierno se siente débil, temeroso y quiere dar un escarmiento. Utiliza la vida de Roberto para asustar a aquellos que disienten públicamente o hacen periodismo independiente’”. Claudia Padrón en Tremenda nota
«Con 63 años de edad, Roberto Quiñones ha soportado ocho meses de confinamiento en el centro penitenciario de Guantánamo. Amnistía Internacional lo declaró prisionero de conciencia el mismo día en que fue llevado a prisión». Katherine Mojena en Cubanet