Tras 13 días encarcelado por el régimen de La Habana, el artista alternativo Luis Manuel Otero Alcántara fue liberado en horas de la noche de este viernes 13 de marzo.
La liberación de Otero Alcántara se produce tras una intensa campaña de denuncia en las redes en la que participaron desde creadores cubanos hasta figuras públicas internacionales. Incluso artistas orgánicos del castrismo habían mostrado su disgusto ante el encarcelamiento del joven.
“Es absolutamente vergonzoso que la administración cubana continúe reprimiendo cualquier voz que no esté alineada con la posición oficial», había expresado el viernes Erika Guevara, directora para las Américas de Amnistía Internacional. «Luis Manuel Otero es un preso de conciencia y urgimos al gobierno cubano a que lo libere inmediata e incondicionalmente».
Otero Alcántara había sido acusado de insultos a los símbolos de la patria (Artículo 203 del Código Penal), un delito que no se ajusta a las leyes y normas internacionales de derechos humanos según la propia Amnistía Internacional, y de “daños” a la propiedad (Artículo 339).
Precisamente, en una entrevista con Amnistía Internacional en 2019, el artista ahora excarcelado había prefigurado la actual situación: “Soy como la punta del iceberg… estamos hablando de todo un sinnúmero de artistas activistas que también hay en Cuba… Van a por mí porque soy supuestamente el más visible y se dicen: ‘si podemos meter preso a éste, qué no podremos hacer con los demás…’”.
«Las 5:00 a.m. en La Habana y Luis Manuel celebra junto a una veintena de intelectuales y amigos el fin de su encarcelamiento y también la perseverancia de quienes promovieron una intensa campaña mediática y ciudadana por liberarle y reivindicar el derecho a expresarnos libremente», declaró la revista El Estornudo en Facebook, pocos minutos después de la liberación de Otero.
«Es la segunda campaña exitosa en Cuba para liberar a un prisionero de conciencia. Antes fue Ariel Ruiz Urquiola en 2018, hoy Luis Manuel Otero Alcántara», recordó la actriz y productora independiente Lynn Cruz en su cuenta de Facebook.
La liberación de Otero Alcántara demuestra de nuevo el poder de la cultura independiente en época de redes sociales. La dictadura cubana, que desde sus inicios entendió la influencia que son capaces de ejercer artistas y escritores como generadores de opinión, ha preferido una vez más «poner el parche» antes que crezca la herida.