Alguien debía derribar la puerta
esta tarde de lluvia olvidadiza
en que inútil me cuelgo la camisa
y temo abandonar la casa muerta.
Padezco de un extraño surrealismo
no logro ir sin naufragios a la almohada
ni cortar pesadillas con la espada
que me impide ser fiel conmigo mismo.
Pervivo en la otredad desde la bruma
pronuncio este discurso que en la espuma
sumerge toda suerte de vocablo.
Perdí el arca y ahora voy errante
fui angélico suicida y navegante
estoy solo sin isla ni San Pablo.
Ghabriel Pérez (Holguín, Cuba, 1968) es narrador y poeta. Ha publicado los poemarios En brazos de nadie (2000), Canción de amor para el fin de los siglos (1999) e Hijo de Grecia (2005), entre otros. Su libro de relatos El parque de los ofendidos recibió el Premio Calendario en 2002, y su poemario Mis amistades peligrosas el Adelaida del Mármol en 2007. Premio de Poesía Intertextual José Martí 2020, del proyecto Puente a la Vista. Este poema pertenece a su nuevo libro Ángel no grato.