El necio, su disparo de nieve

 

Resulta que por estos días el cantautor Silvio Rodríguez ha protestado porque el grupo Orishas utilizó un fragmento de su conocida canción ‘Ojala’ para ambientar, digamos, un tema con Beatriz Luengo que en Yotube ya pasa de las 600.000 visualizaciones. En la porfía entró esta semana Manolín, el Médico de la Salsa, y lo cito:

“Dices tú que no diste a Orishas tu aprobación para utilizar la estrofa de tu canción “Ojalá”, que no te la pidieron. Una pregunta Silvio: La revolución que tú defiendes y representas, en 60 años, ¿cuándo nos ha pedido permiso para algo ? Y esos sí han hecho con nosotros lo que les ha salido de los cojones. Como dicen los cubanos, ‘Ay par favarrr’, no me hagas reír. Pero tranquilo Silvio, por alzar tu voz en contra, en un futuro no te prohibiremos en Cuba, ni te quitaremos tu país, ni te golpearemos, ni te encarcelaremos, ni te desterraremos…”.

Esto de que “no te golpearemos ni te encarcelaremos”, dicho a Silvio, me recuerda otra canción del mismo cantautor procastrista. En un fragmento de otro tema muy conocido, al que tituló ‘El necio’, Rodríguez revela su obsesiva aspiración, la misma que a lo largo de la historia ha seducido a tanto buen robolucionario, y lo cito también: «Dicen que me arrastrarán por sobre rocas, cuando la revolución se venga abajo, que machacarán mis manos y mi boca, que me arrancarán los ojos y el badajo». El referente heroico, militante, sacrificado del hombre nuevo despliega en estos versos su íntima razón de ser: ya no se trata de construir una sociedad más justa o equitativa sino de escapar del ridículo a través del martirio.

En el caso de Cuba, al contrario de lo que algunos piensan, la ya inminente transición probablemente no estará marcada por un sangriento ajuste de cuentas; ese país es la olla de presión donde se cuecen la burla, el sarcasmo, el choteo al que Jorge Mañach dedicara su monumental estudio. Silvio Rodríguez, por supuesto, no será arrastrado sobre rocas, nadie le machacará las manos ni le arrancará los ojos; sospecho que en su fuero interno él lo sabe. A la caída, a la muerte natural de la imagen, de la rutina ideológica amortajada por el humor, es a lo que en verdad le temen los egotistas del régimen cubano; muy probablemente ellos no sean objeto de linchamientos ni fusilamientos ni “ejecutamientos” ni “arrastramientos”. A ellos los ajusticiará un multitudinario y demoledor ataque de risa, tal vez un reguetón parodia como el de Chocolate MC, del que dejo también link. Aquí pueden consultarse ambos temas:

https://www.youtube.com/watch?v=NrM25odbVkY

https://www.youtube.com/watch?v=W-HpEqqVAUE