«Cuba, la isla donde se llevó a cabo una de las revoluciones más radicales del mundo. En pleno siglo XXI hoy puedes morir de asma, diabetes e hipertensión arterial por la falta de medicamentos. En pleno siglo XXI un pueblo ha quedado desprovisto de todos sus derechos, solo le queda el derecho a la muerte. Hay que elegir entre morir aplastado por un tanque, como sucedió en Venezuela, o ver caer a tus familiares y amigos desde la más absoluta impotencia por la ausencia de fármacos. No hay términos medios en este caso». Lynn Cruz, actriz y productora
«Debo estar alucinando. Debo, por más esfuerzo, estar viviendo en un mundo paralelo. El hecho es simple: he recibido la inextricable y vil lista de nuevos precios de los cuales dependerá el pueblo de Cuba, asimismo los innumerables salarios. De ser verdaderos -pues no se ha oficializado ni he accedido a fuentes verificables y oficiales- será una nueva bofetada a la poca confianza que nos queda en un sistema que, cada vez más, pierde el sentido de la realidad y se hunde en un abismo de desesperación. También será una verdadera razón para demostrarnos que, si pasadas medidas fueron un parche a la economía, las nuevas lidian con la provocación y la estulticia. Pero no puedo adelantarme a los acontecimientos. Solo digo: ¡Pueblo de Cuba, estad alerta!». Duandy Oscar Gómez, escritor
«Querida Mariela, tú ta grave de la mente y aquí toy yo pa’ aclararte. Tu abuela Lina murió de sufrimiento al ver el repudio contra su hija Juanita Castro, cuando esta condenó a tu tío y a tu padre por el vuelco comunista que le dieron a una revolución que había triunfado para todos los cubanos. Y Juanita tuvo que exiliarse. Amada mía, pide perdón o toma fitina». Ghabriel Pérez, poeta